Dos días antes del inicio del salón del automóvil más grande del mundo, BMW presentó en Shanghái una experiencia de conducción sin precedentes. El protagonista: el BMW Vision Driving Experience, un vehículo de alto rendimiento desarrollado a partir del BMW Vision Neue Klasse, que redefine los límites de la dinámica de conducción.
En el centro de este innovador modelo se encuentra el “Heart of Joy”, el nuevo supercomputador de BMW, visible en la consola central del vehículo durante la presentación (aunque no será visible en los modelos de producción). Este potente sistema controla todas las funciones dinámicas del vehículo con una velocidad y precisión sin precedentes, trabajando en conjunto con el software BMW Dynamic Performance Control.
Diseñado específicamente para llevar la física de conducción al extremo, el BMW Vision Driving Experience mostró todo su potencial con maniobras espectaculares a cargo de los pilotos Jens Klingmann y Elias Houndtonji, figuras principales de la BMW Brand Night.
“El BMW Vision Driving Experience es el prototipo más potente que hemos construido hasta ahora”, afirmó Jochen Goller, miembro del Consejo de Administración de BMW AG. “Con hasta 18,000 Nm de par motor y nuestro nuevo ‘Heart of Joy’, este vehículo transforma la energía eléctrica en placer de conducción puro. La reacción del público ha sido simplemente abrumadora”.
Gracias a su aerodinámica activa, el prototipo genera una carga aerodinámica de hasta 1.2 toneladas y fuerzas laterales de hasta 3g, comparable a los estándares de la Fórmula 1. Esta “máquina de conducción” sirve como banco de pruebas extremo para garantizar el máximo rendimiento y eficiencia en futuros modelos eléctricos de BMW.
El “Heart of Joy” será una pieza central en todos los vehículos eléctricos de la Neue Klasse, cuya producción comenzará a finales de este año en la planta de BMW Group en Debrecen, Hungría. Este nuevo sistema permitirá una conducción más ágil y estable, así como una eficiencia de frenado regenerativo del 98%, un 25% superior a las arquitecturas actuales.
Aunque no está destinado a producción en serie, el diseño exterior del BMW Vision Driving Experience está inspirado en el lenguaje estético del BMW Vision Neue Klasse: silueta monolítica, pasos de rueda prominentes, cabina empotrada y el distintivo frontal tipo “nariz de tiburón”.
Para su debut en Shanghái, el vehículo fue pintado con una innovadora pintura fluorescente autoluminiscente, capaz de absorber luz incluso con poca iluminación. En la oscuridad, la carrocería varía de un tono blanco amarillento a un vibrante amarillo neón, mientras que la parte trasera cuenta con una “película mágica” que crea un degradado de colores que va del amarillo al rosa bajo luz UV, resaltando aún más su carácter único e innovador.
